LAS MESTAS I - CÁCERES

de la Villa Cacerense

Las Mestas I

Crónica desde la Ronda de la Pizarra

Poca clientela quedaba ya en la taberna de la Colorá de los de toda la vida, tan solo algún

despistado que iba o venia de viaje en tren, y al pasar por la puerta entraba a trasegar alguna pistola de vino que otra, tan solo se veía aquella tarde al tio Chivario, el que parece le hubiera puesto en ese mismo sitio cuando se inauguró la taberna, ahí se había quedado perenne, contando historias para entretener a la otrora abundante clientela de perdedores, y como no los de la interminable partida de ranas, con su soniquete de Clan, Clan, Clan, al resbalar los tejos por la boca de la rana.

Siéntate mozo, y saca el cuadernillo, que vamos a seguir con la historia de ayer, dijo el tío Chivario, sin esperar a que la Eugenia se lo ordenara, ¡quedamos en que, con carácter de interés de ámbito nacional en lo referente a los ganados, se empezó a instaurar las Mestas.

Ya se van los pastores

a la Extremadura,

ya se queda la sierra

triste y oscura.

El Honrado Concejo de las Mestas, se desveló en la defensa de la ganadería a nivel nacional, eran muchos los privilegios los que gozaba, y con estos validó su posición y la fuerza que le atribuían los privilegios, se constituyó en un auténtico sindicato ganadero, llevando sus privilegios hasta el abuso de la persecución de todas las cabañas que no estuvieran asociadas, más Cáceres en un principio, no solo no llego a pertenecer a la Mesta, si no que se opuso denodadamente, al tránsito de todos los ganados mesteños por su término, y tuvo que ser tan solo ante la imposición Real, con lo que tuvo que ceder a que se trazaran las cañadas que lo atraviesan, y por las que se le obligaba el paso al pastor Leones, que y curiosamente desde entonces se les bautizo como serranos. Pero sin dejarlo de lado, al contrario, se entabló una lucha entre la villa cacerense y el Honrado Concejo de las Mestas, que duró cerca de do siglos y medio, durante este tiempo hubo que sufrir numerosos incidentes y que hasta su fin, en las postrimerías del siglo XV con la entrada de Cáceres en la entidad, y fue como un hato más de la gran cabaña. Tras una gran humillación de una sentencia que parece injusta y agravante.

Y este fue al cabo el sacrificio que tuvo que hacer Cáceres, para salvar la ganadería, lo que da muestras del interés y consideración que tenían en su riqueza tradicional, y es que desde el principio de la conquista en 1229, se dieron perfectamente cuenta de que la tierra de Cáceres y su término, o era ganadera o no era nada.

Ya se van los pastores

Ya se van marchando

Más de cuatro zagalas

Quedan llorando

Nos encontramos con que en el mes de abril, y festividad de San Jorge, del año de 1229, fecha en que Cáceres queda definitivamente en poder cristiano, y que desde ese mismo instante comienza su existencia como entidad geográfica, histórica, política, económica, de Hins Qazrix no hay noticias de como seria, de Al-Idrisi, ni la Cazire de las crónicas, ni mucho menos de la Norba de los romanos y visigodos, pero si que Cáceres, resurge con fuerza en todos los aspectos de progreso a partir de aquel 1229.

Y es entonces cuando deja de ser lugar de paso, o lugar de refugio de bandos de guerra, que fueran tropas moras o cristianas, a partir de la conquista es cuando empieza a construirse una sociedad estable en la villa cacerense, es también entonces el esfuerzo y lucha del hombre contra la tierra, que habría de cambiar un erial en tierras productivas, con muchísimo esfuerzo y sudor, en silencio, cosa que según parece es típico de estas tierras, el sufrir en silencio, realizando sacrificios que han sido en todos los tiempos las características de la existencias de los cacereños, como si el vivir histórico hubiera dejado impreso en la vida cacereña, ese callado aceptar y vivir laborando en silencio, ese silencio de los habitantes de estas tierras, que aún sigue vigente, en los tiempos presentes.

Fueron los romanos, y en la primera fase de conquista que desarrollaron por el Su y el Este de la península afectando a las regiones más ricas y civilizadas, la siguiente fase de la conquista romana uvo como principales fuerzas de resistencias a los lusitanos en alianza con los vetones, y es en esta época cuando destaca Viriato, pastor desde niño, acostumbrado a la vida montaraz y gran conocedor del terreno, se erigió en líder de las campañas contra los romanos.

¡Desde siempre vieron la importancia que tenía la ganadería para los españoles, y que la costumbre de trashumar con sus ganados estaba bien arraigada, cuando les era necesario, y de ellos es buena prueba las guerras que sostuvieron con los romanos, y que no fueron otras las causas, si no que los conquistadores romanos, pretendía desarrollar y fomentar la agricultura, y ellos, ponían su empeño en estorbarles, porque con ello, quitaban pastos a los ganados, creando impedimentos a la trashumancia.!

(Vicente Paredes)

La invasión de Suevos, Vándalos, y Alanos, alcanzaron Extremadura a comienzos del siglo V y hacia el año de 470 fueron expulsados por los Visigodos, estos dominaron estas tierras hasta la invasión musulmana, mas según parece eta situación no alteró en sustancia el sistema socio-económico, según parece la existencia hispano-romana, siguió teniendo en su poder los latifundios en Extremadura, aunque la situación de la nobleza era inferior en contraposición de la prosperidad de la iglesia.

Y los visigodos prefirieron la ganadería a alas cosechas, el pasto al cultivo, y destinaron los términos vacantes al pasto común, con el aumento del ganado, en el más antiguo código Español, como es el fuero Juzgo de los visigodos, en el que se atendían con amplitud las necesidades pastoriles de la trashumancia, lo qui equivalía a tener acceso sin restricciones a las tierras abiertas y con derecho de los pastores a la tala de árboles, y prohibiendo a sus pueblos a cercar sus tierras comunales , obstruir las cañadas, o impedir el acceso a las tierras de baldío.

Penetraron los musulmanes en la península a comienzos del siglo VIII, producido por la decadencia del reino visigodo, que aprovechando las luchas internas, tardaron poco en conquistar el territorio, procediendo al mantenimiento y organización del territorio ocupado, a este territorio ocupado denominaron Al-Andaluz.

Y así las cosas los árabes que de esto entendían, reservaron los mejores tierras, y en especial las del valle del Guadalquivir, donde los bereberes se asentaron, en la alta tierra de la meseta y en la laderas de la sierras, buscando, buscando como los árabe , las condiciones que más se les asemejara a sus lugares de procedencia.

Y resultó que esos lugares, que se asemejaban mas a los de su origen los encontraron en los territorios de la Extremadura, en se asentaron en las localidades de esta tierra, donde favorecieron una economía ganadera, y en especial la basaron el en el ganado lanar, y como era de esperar, esta orientación ganadera tendría una extraordinaria influencia en el futuro que se labrara la Extremadura.

En los comienzos de la denominación árabe, los territorios se consideraban como propiedad colectiva del estado musulmán, pero poco a poco se fue generalizando el reparto individualizado de la tierra, y este estuvo tan discriminado a favor de los árabes, que se prestó para la sublevación de los bereberes, llegando a la conclusión que el sistema de producción es el heredado del anterior, sumándose al latifundismo.

A todo esto, el propietario musulmán paso a residir en las ciudades próximas a sus territorios desde donde recibían las rentas de sus aparceros, estos eran en su mayoría antiguos campesinos hispano-godos, dando de esta manera un impulso al renacimiento de las ciudades.

Hay que tener en cuenta que, la situación geográfica de la Extremadura tuvo influencia en el sistema productivo, inclinándose a favor de la ganadería, la más fácil de defensa por su movilidad, dándose el resultado de que esta característica de la región Extremeña, se pondría más en relieve en la Baja Edad Media, en lo que fue confluencia de estados feudales, en la marca fronteriza musulmana con la de los reinos de León y Castilla, mientras por el Oeste, no se apagaban los vientos e guerra con los vecinos portugueses.

Durante los siglos de conquista, la Extremadura, constituiría un a vasta entidad geográfica al Sur del Duero, precisamente de ahí le viene la denominación al nombre de Extremadura aplicado a esta región, que aparecen en los textos de la época, distinguiéndose de la Trasierra, la zona mas al Sur del reino de León, y en que se ajusta el limite de la Extremadura actual.

Y nos encontramos con que el primer contacto de la Extremadura con la conquista, ocurrió cuando los Reyes cristianos intentan pasar hasta los riberos del Tajo, siendo el distintivo de esta etapa la plaza fuerte de Coria, cuya primera toma fue por Alfonso VI en el año de 1079, estando metido en faena de conquista en Badajoz, la toma definitiva de la Plaza de Coria, muy cerca de la marca del Tajo en 1142 por Alfonso VII, coincidiendo con el final del periodo Almorávide, más durante este periodo no hay reseña de ningún avance de tipo militar, ocurriendo, entre otras cuestiones, las luchas mantenidas con carácter interno entre los reinos cristianos, y tuvo que ser con la derrota y hundimiento de los musulmanes en la batalla de las Navas de Tolosa en 1212, cuando los cristianos de atrevieron a cruzar el Tajo y el Guadiana, y el año de la toma de Badajoz en 1230, el de la unificación de los reinos de Castilla y León, y bajo el reinado de Fernando III el Santo, monarca que terminaría la conquista en la tierra Extremeña.

Y llegamos a que en este tiempo de conquistas, la colaboración de las Ordenes Religioso-Militares, fueron fundamentales en su colaboración, aportando junto a sus caballeros, hombres de guerra y peones, junto con la iglesia y la nobleza. Las principales ordenes militares que encontraron asiento en la tierra Extremeña fueron:

La Orden de Santiago, surgida de la desaparecida Orden de los Fratres, que ocupó una amplia franja en el centro de Extremadura y prolongándose hacia el Sudeste, teniendo como principales cabeceras de encomiendas las de Montánchez, Mérida , Llerena, Alange, Hornachos y Reina

La Orden de Alcántara, que tenía como territorio de influencia el Nordeste de la Extremadura, y en torno a la Serena, con Alcántara, y Magacela como cabezas de sus encomiendas.

La Orden de los Templarios, esta orden ocupó el Sudeste extremeño, con Jerez de los Caballeros como centro principal y tras la desaparición de esta orden en 1312, sus posesiones se incorporan a las de la Orden de Santiago.

-Mitra la ahora que es Chivario, venga dar por terminada la historia de hoy, venga los de la rana acabando, y que nadie se vaya sin pagarla cuenta y a la puta calle que ya es tarde y llega el sereno de hacer la ronda. - voceaba la Eugenia, saliendo tras el mostrador de chapa de cinc, mientras sonaban los últimos tejos al golpear en la boca de la rana Clan, Clan, Clan,

Ya se van los pastores

Hacia la majada

Ya se queda la tierra

Triste y callada

(Fuentes Floriano Cumbreño-Villla)

(Fuentes Trashumancia Extremadura)

Agustin Díaz Fernández